Tapar una puerta es bastante fácil de lograr. Sin embargo, son necesarios algunos pasos para el éxito de este proyecto.
Las herramientas necesarias
Para una puerta interior:
- un destornillador eléctrico;
- un martillo;
- montantes y rieles;
- cartón-yeso (para una puerta interior);
- una sierra de mano
- yeso para placas de yeso;
- un metro ;
Para una puerta exterior:
- bloques de concreto;
- una amoladora con discos adecuados para cortar el bloque de hormigón;
- mortero listo para usar;
- una paleta;
- un nivel de burbuja.
Pared de una puerta interior
- Comience quitando el marco de la puerta desenroscándolo.
- Si es necesario, use el mazo con cuidado para quitar el marco.
- Asegure los rieles al techo y al piso.
- A continuación, fije los montantes empezando por una pared y asegurándose de un espacio de 60 cm entre cada montante.
- Tome las medidas del marco de la puerta y corte la placa de yeso para que tenga las mismas dimensiones que el marco.
- Coloque la placa de yeso y atorníllela a los rieles y montantes.
- Llene el espacio vacío alrededor de la placa con masilla para paneles de yeso.
- Nota: también puede revestir una puerta interior con baldosas de yeso. La instalación se realiza con cola de yeso y de la misma forma que con bloques de hormigón.
Pared de una puerta exterior
- Retire el marco de la puerta.
- Prepare el mortero y coloque una primera capa de mortero entre las dos paredes de la puerta.
- Haz una primera fila de bloques de hormigón.
- Verificar la horizontalidad y aplicar una segunda capa de mortero.
- Entre cada fila, coloque los bloques de hormigón para que las juntas no queden alineadas.
- Corta los bloques de hormigón si es necesario con una amoladora.
- Continuar de la misma forma para cada piso hasta el dintel.
- No avance demasiado rápido para dejar que el mortero fragüe.