Seringat: plantación, cuidado y poda

También llamada philadelphus o jazmín del poeta, la jeringa es un arbusto rústico con flores blancas y fragantes, como el aroma del azahar, y que pertenece a la familia de las hortensias. Con un tamaño de entre 1 y 3 metros de altura, existen diferentes variedades que florecen entre los meses de mayo y julio.

Jeringa de plantación

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La jeringa debe plantarse en otoño para favorecer su enraizamiento, o en primavera, evitando cualquier período de heladas. Elija un lugar soleado preferiblemente, pero no caluroso, que magnificará su floración, o semi sombreado. En cuanto a la naturaleza del suelo, el arbusto es poco exigente y prospera en cualquier tipo, ya sea rico o neutro, calizo o ácido, por ejemplo.

Mantenimiento de jeringas

La ventaja de la jeringa es que requiere poco mantenimiento. En cuanto al riego, llevar agua al arbusto en verano si está en maceta, o si lo has plantado en primavera, para favorecer su enraizamiento el primer año después de plantado. Aunque no sea imprescindible ningún fertilizante, se puede recomendar desde finales de primavera y hasta finales de verano para permitir el desarrollo de una floración más bonita y la aparición de una nueva en el otoño. Finalmente, el jeringa no es muy sensible a enfermedades e insectos, aparte de los ataques de pulgones. Además, no requiere ninguna protección especial en invierno, siendo resistente a temperaturas negativas de hasta -20 ° C.

Tamaño de la jeringa

Si bien se puede hacer una primera poda de la jeringa después de plantar para ayudarla a crecer, generalmente es recomendable esperar tres años después de plantar. Luego proceda cada dos años, después del período de floración, quitando los tallos muertos, dañados y frágiles, y cortando los brotes del año de un tercio a la mitad de su longitud.

Nota: Todas las especies de jeringa no son fragantes, así que tenga cuidado al seleccionar su arbusto.