¿Cómo se gravan las asignaciones de prácticas más allá de los tres meses?

Pregunta de Jérôme (Croissy-sur-Seine)

Entiendo que las asignaciones de prácticas obligatorias para un estudiante no están gravadas si una prácticas es inferior a tres meses pero que se convierten y esto, desde los primeros euros si es superior a tres meses. ¿Es esto realmente cierto? Y si mi hijo siguió trabajando a tiempo parcial en la empresa después de su pasantía y hasta fin de año, ¿cuál es la regla?

Respuesta:

Las asignaciones de prácticas pagadas por las empresas a los estudiantes están exentas en tres condiciones: la pasantía forma parte de la escuela o programa de estudios, es obligatoria y su duración no supera los tres meses. Si falta una de las condiciones, las asignaciones de prácticas están totalmente sujetas a impuestos (por ejemplo, en el caso de una práctica de 6 meses). En este caso, el becario tampoco podrá beneficiarse de la exención prevista a favor de los estudiantes menores de 26 años, ya que la práctica laboral es inseparable de la formación seguida.

Una vez finalizado el período de prácticas, si su hijo ha desarrollado su actividad paralelamente a sus estudios en el marco de un contrato de trabajo, podrá, en determinadas condiciones, beneficiarse únicamente de estas sumas (excluidas las anteriores asignaciones de prácticas recibidas) del régimen de exenciones reservado a los estudiantes asalariados. En efecto, los salarios percibidos por los jóvenes de 25 años como máximo, el 1 de enero de 2013 en retribución de una actividad desarrollada durante el curso escolar o universitario o durante sus vacaciones, están, a opción de los beneficiarios, exentos de impuestos. de ingresos dentro del límite de tres salarios mínimos mensuales, es decir, 4.291 euros.

En la práctica, los jóvenes que opten por la exención no tienen que declarar la casilla 1AJ (si tributan por separado) o la casilla 1CJ, 1DJ (si forman parte del hogar tributario de sus padres) por la parte de su salario que exceda 4.291 euros. Si su hijo no desea optar por la exención (en particular para preservar su derecho al bono de empleo), debe declarar todos los salarios recibidos.