¿Rejillas de ventilación bloqueadas? ¿Fusible quemado? Varias razones pueden explicar el fracaso de un CMV. Este último debe mantenerse a menudo para que sea eficiente. A continuación se explica cómo reparar un VMC.
Las acciones correctas para reparar un CMV
- Para evitar que el motor se sobrecaliente y se queme, debe limpiar el CMV con la mayor frecuencia posible, cada tres a seis meses. La limpieza incluye tanto las salidas de aire como el motor y los filtros.
- Reemplazar un motor representa una inversión importante entre el precio del motor y el de la mano de obra, ya que este tipo de trabajo debe ser realizado por un profesional.
- Advertencia: cada tres años, llame a un profesional para una revisión completa y mantenimiento de su CMV.
Las principales fuentes de fracaso
- Las salidas de aire están bloqueadas: una simple limpieza podría reiniciar el CMV.
- Un fusible quemado: con un multímetro, verifique la fuente de alimentación conectada al CMV.
- Las fundas están rotas: en cualquier tienda de bricolaje o en Internet, encontrará adhesivo diseñado especialmente para VMC.
- Los conductos están llenos de agua: tome un balde de agua y vacíe los conductos.
Si ninguna de estas explicaciones parece ser la causa de la falla, comuníquese con un electricista o ingeniero de calefacción.