Si no se mantiene adecuadamente, el hierro forjado se empañará y se oxidará. Para evitar estos inconvenientes, aquí tienes algunos consejos para que tus muebles se mantengan con su aspecto original.
Para limpiar hierro forjado:
- El primer método es limpiarlo con crema desengrasante . Este, formado por finas partículas de mármol, permite eliminar perfectamente la suciedad sin riesgo de rayones.
- Si el hierro forjado está muy sucio, un segundo método es limpiarlo con agua con jabón y amoniaco agregado (no más de una cucharada por litro de agua).
Para eliminar el óxido:
- Un primer método es eliminar el óxido con un cepillo de alambre . El resultado es efectivo y el cepillo muy práctico porque te permite entrar en todos los rincones.
- También puede utilizar tela de esmeril que resultará especialmente útil para las barras.
- Finalmente, sepa que el método más rápido sigue siendo el cepillo de varilla montado en un taladro .
- Si el hierro forjado está muy oxidado, puede remojar el hierro forjado durante unos días en petróleo y cepillarlo con un cepillo de alambre . De hecho, el aceite tiene la particularidad de infiltrarse bajo el óxido, lo que permite una eliminación eficaz.
Una vez que la suciedad y el óxido hayan desaparecido, pula el hierro forjado con pasta de pulir y un disco de pulido de fieltro o algodón . No intente que el hierro forjado luzca brillante, este no es su estado natural.